San Valentin por Myriam Delfini

Enamorarte de ti mismo para enamorarte de otro

San Valentin - Enamorados

 

Flores, dedicatorias, bombones, postales, regalos de cualquier tipo...
Este domingo por diferentes motivos y en diferentes lugares del mundo todo se tiñe de rojo pasión.
Puede que se te iluminen los ojos por el entusiasmo cuando escuchas esto, o puede que se te pase por la cabeza cómo podrías hacer para descanonizar (no existe la palabra como tal, pero para el caso nos valdrá) al señor Valentín.


Eso sí, al margen de las tradiciones que pueda implicar esta celebración, estoy segura de que, de una u otra forma, deseas hacer sentir especial a tu pareja y sentirte también especial a su lado. Aaahhh… (suspiro) el amor… (sonrisa).


Ya que tenemos San Valentín a la vuelta de la esquina, si me lo permites voy a aprovechar este boletín para pedirte que te enamores. Y que te dejes enamorar.
Porque como ya sabes el amor puede enseñarte más de lo que te imaginas sobre ti mismo.
El amor no es una cuestión de pareja
Pero no solo estoy hablando de tu chica/o. Sería una pena que redujésemos eso del amor tan solo al mundo de la pareja.


Todos deseamos que nos hagan sentir únicos y especiales, en cualquier lugar, en cualquier momento.
Nos encanta que nos traten bien cuando vamos a comprar el pan, o a cenar a un restaurante, cuando vamos a la biblioteca a buscar un libro o cuando nos hospedamos en un hotel.
De hecho, volvemos a muchos de esos lugares, y no a otros, porque han sido agradables con nosotros, porque no nos han hecho sentir como uno más, porque se han preocupado por aquello que podríamos necesitar.

Y lo mismo ocurre con todo lo que te rodea, hijos, clientes, publico, etc.
Cómo concibes esa relación?
¿Dirías que tratas continuamente de enamorarlos, o tal vez no les prestas la misma atención que le prestarías a un amigo o a tu novia?
Como puedes imaginar, aquello que funciona y que afianza y hace crecer la relación con tus seres más allegados también tiene el mismo efecto en tu público.

 

 

 

"Cuenta una antigua leyenda oriental que la reina Malika paseaba por los jardines de palacio con su marido, el rey Kosala, durante un cálido atardecer.


La pareja iba del brazo cuando el rey le preguntó a Malika, — ¿A quién amas más en este mundo?” — suponiendo que diría que a él—
Sabes querido —le contestó—, creo que a mí misma. El rey reflexionó y, finalmente dijo yo también.


Así, ambos estuvieron de acuerdo en ir a visitar a Buda al día siguiente y pedirle su parecer. — Amarse más a uno mismo —dijo Buda— es el primer paso del camino. Sólo cuando lo practicas, eres capaz de amar plenamente a los demás y, cuando lo haces, también entiendes que los demás elijan amarse a sí mismos".

 


Es muy común hoy en día escuchar que necesitamos querernos a nosotros mismos pero muy pocos explican el alcance de esa palabra.

Qué sería quererme, desde mi punto de vista?
Cuidarme
Respetarme
Escucharme
Aceptarme
Amarme...


Y te invito a que completes esta lista.

 

 

El modo en que nos sentimos con respecto a nosotros mismos afecta en forma decisiva todos los aspectos de nuestra experiencia, desde la manera en que funcionamos en el trabajo, en el amor o en el sexo, hasta nuestro proceder como madres - padres y las posibilidades que tenemos de progresar en la vida.

 



A qué me refiero con cuidarme?

- No someterme a riesgos innecesarios.
- Muchas veces entiendo que sin darnos cuenta en las relaciones metemos nuestra cabeza dentro de la boca de un león y pretendemos salir sin ser mordidos.
- Descansar el tiempo que necesito.
- Tener mis chequeos al día o ir al médico si lo preciso.

A qué me refiero con respetarme?

- Reconocer lo que valgo y poder elegir con quien estar y con quien no deseo estar.
- No someterme a estar con gente que me maltrata o que no me tiene en cuenta o que no me elige.
- Honrar mis ideas y mi forma especial de hacer las cosas. Conocer qué es lo que me apasiona y hacerlo.
Sentir confianza en mí misma y apostar a que yo puedo. Ser yo misma.

A qué me refiero con escucharme?

- Darme cuenta qué es lo que preciso.
- Reconocer lo que necesita mi cuerpo y dárselo.
- Poder distinguir entre mis voces internas, la voz de mi sabiduría y la de mi intuición y hacerlas valer.
- Elegirme frente a los requerimientos de los demás.

A qué me refiero con aceptarme?

- Quererme como soy, tenerme paciencia con mi proceso, acompañarme siendo mi mejor amiga los 365 dias las 24 hs.

 

A qué me refiero con amarme?

Y aquí aunque todos entendemos que es amar a otras personas, realmente son muy pocas las que pueden aplicarlo a si mismas.


Cuando amas a otro qué haces?

Le dedicas tiempo, le das los gustos, lo tratas bien, lo respetas, lo cuidas, lo buscas, pasas tiempo con la otra persona a solas, buscas tener intimidad con ella, le haces regalos, te gusta sorprenderlo, le preguntas lo que necesita, lo eliges, te enfocas en sus cosas positivas....


Bueno amarse a si mismo, desde mi punto de vista, sería poder hacer todo esto con uno mismo. Te animas?


Querido viajero cósmico: dijo Oscar Wilde que amarse a uno mismo es el comienzo de un romance eterno y yo te pregunto:


Estarías dispuesto a enamorarte de ti mismo con todo lo que eso implica?

 

 

 

 

 

 

ALMA GESTALT

"El Arte de Crear la Vida que Anhelas"